
Morelos avanza hacia una cultura de paz desde la visión de la gobernadora Margarita González Saravia, quien ha puesto en el centro a las juventudes como aliadas fundamentales para transformar la vida comunitaria. En este sentido, la Secretaría de las Mujeres, a través del centro LIBRE Jiutepec, llevó al Colegio de Estudios Tecnológicos, Industriales y de Servicios (Cetis) número 12 una jornada de sensibilización en el marco del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
La actividad reunió a más de 400 estudiantes para dialogar, nombrar lo que duele y construir nuevas formas de relacionarse. Asimismo, se desarrollaron tres ejes prioritarios: prevención del abuso sexual, entornos digitales libres de violencia y derechos humanos de las mujeres.
A lo largo de la jornada, la palabra se volvió un puente. Desde la prevención del abuso sexual, Verónica Noguerón Corona invitó al alumnado a reconocer límites, nombrar riesgos y comprender que la violencia nunca es responsabilidad de quien la vive: “Cuando una persona joven aprende a escuchar su intuición y confía en su voz, comienza el verdadero proceso de protección”, compartió.
Posteriormente, Ixkandeox Martínez Mendoza abrió un espacio de reflexión sobre la violencia digital y la importancia de habitar internet sin miedo. Se habló de huellas digitales, consentimiento, privacidad y las formas en que la tecnología puede ser una herramienta para fortalecer derechos, no para vulnerarlos.
Durante las actividades, las y los estudiantes debatieron, cuestionaron estereotipos y asumieron su papel en la reducción de las violencias de género.
Para la secretaria de las Mujeres, Clarisa Gómez Manrique, estos espacios confirman que las juventudes son parte de la transformación que Morelos impulsa:
“La prevención nace cuando una comunidad se reconoce corresponsable. Las y los jóvenes tienen el poder de reescribir las historias de violencia y convertirlas en caminos de libertad y respeto”.
El beneficio directo de la jornada fue la sensibilización, la reflexión crítica y, especialmente, la corresponsabilidad masculina, un eje prioritario para construir entornos seguros dentro y fuera de la escuela.
En congruencia con el latido de “La tierra que nos une” estas acciones consolidan un Morelos donde cada adolescente cuente con herramientas para nombrar, detener y transformar las violencias. Así, con la fuerza de las juventudes, se sigue tejiendo un estado que apuesta por la dignidad, la igualdad y la vida libre de violencias para todas y todos.